Pasó por mis manos: aros de extensión en macrofotografía

Antes de nada dejadme poner el nombre de la especie de mariposa que abre esta entrada: Melitaea phoebe, que he podido identificar a través de la guía Mariposas por la Vida. 

A lo que iba. Quería comentar que un recurso muy fácil y barato para tomar macros de naturaleza es utilizar un aro de extensión más un objetivo de focal larga, ya sea un zoom o no. Para la foto que veis, he utilizado un aro Kenko como el de la imagen inferior:

Su función es separar el objetivo del cuerpo de cámara, con lo cual perdemos la capacidad de enfocar a infinito pero ganamos poder de aproximación. Si además el objetivo utilizado es de focal larga, en este caso un MZuiko 40-150 que equivale a un 80-300 para carrete, tenemos una combinación casi perfecta para fotografiar animalitos asustadizos porque podemos mantener una distancia respetable entre ellos y la cámara. Como el aro de extensión no tiene lentes, no influye en la calidad de imagen y además en este caso seguimos manteniendo el enfoque automático y otras comunicaciones entre cámara y objetivo.  Por eso los aros de extensión ( o tubos de extensión) son una opción muy recomendable para los que queráis hacer macros y ya disponéis de un objetivo de focal larga aunque no sea macro, ya sea zoom o fijo. Si os hacéis con un juego de dos o tres aros de diferente grosor, tened paciencia y empezad por el más estrecho para ir practicando ya que acertar el foco y el encuadre con un objetivo largo en macrofotografía no es fácil. A cambio, por poco dinero tendréis todo un mundo a vuestro alcance, literalmente.

Olympus OMD + MZuiko 40-150 + Aro ext. Kenko 10mm.