En una feria medieval en Hostalric, Girona, encontré esta parada de material "bélico" para niños de la época. Es curioso porque el crío se acababa de poner en el sitio de su madre, y estaba muy contento. Le pedí permiso a ella, y al tomar esta imagen el chaval me dedicó esta mirada torva. En todo caso, procuré incluir en la imagen la multitud de herramientas y útiles que utilizaban para su trabajo. Olympus E-300 + 14-54
2 amigos han escrito:
en un libro que habla acerca de conspiraciones trata el tema de las calaveras como elemento para que los jovenes se vayan insensibilizando con respecto a la muerte y la campaña tendria que ver con la cantidad de calaveras y huesos cruzados que se ven en la ropa zapatos desde hace un tiempo no los clasicos tipo piratas angeles del infierno si no en la ropa especialmente de chicas...
je, je, je... Está gracioso el chaval, Martín. Hombre, más que mirada "torva", yo lo que veo es la mirada de un "neo-protagonista" encantado de ser fotografiado, pero disimulando que le gusta, que se siente protagonista, y lo hace frunciendo el ceño para fingir la molestia de quienes se sienten perseguidos por las cámaras.
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