Lllegé al claro del bosque cuando la luz empezaba a decaer. Me senté mas por cansancio que en busca de una imagen, aunque mi vista, después de unas horas de vagabundear por la naturaleza, no podía evitar buscar la presa. Cuando la ví, no hice nada, como hubiera hecho ella. Estaba seguro de que también me había visto. Y esperé. Esperé a que se acostumbrara a mí y no se asustara, esperé a que bajara la luz, esperé y pensé como lo haría. Y probé juntar el atardecer y la peligrosa belleza. Y me llevé ese momento que he querido compartir con vosotros.
Mientras escribo estas líneas, he sentido la necesidad de oir la canción de Mediterráneo, de Joan Manuel Serrat. Me ayuda a sentirme bien.
Olympus E-300 + Zuiko 14-54 + Flash Metz AF 44
3 amigos han escrito:
En resumen, que la espera valió la pena!
Vaya foto! Chapeau Martín.
Solo un fotografo puede entender que otro fotografo se colme de paciencia para obtener una instantanea, pero es ahí donde obtenemos satisfacción, el resultado es importante pero el entorno como dice nuestro amigo Johan lo es mas. Muy buena, valió la pena la espera. Una abraçada, y gracias de nuevo por tus fotografias.
Me parece muy original la toma apuntando hacia el cielo. Además de esa luz que mimetiza la mantis con la rama.
Saludicos
Publicar un comentario