Esta toma era muy complicada, probé de medir la luz en varios sitios deseando que no se deshiciera la escena. Al final medí en puntual sobre la cara del niño. El resto ha quedado quemado, pero me gusta. Olympus E-300 + 14-54
De nuevo trazas la misma línea oblícua entre los dos objetos importantes de la imagen, como en Dos Piedras, aunque esta vez la comunicación va de dentro de la foto hacia fuera; hacia el espectador (la mirada del niño), y hacia una continuación del espacio en el marco izquierdo (alguien que habla con la señora desde fuera de la imagen). Creo que la decisión de la medición sobre el niño fue la más conveniente. Me gusta. Saludos.
6 amigos han escrito:
Lo importante es que la fotografia funcione, y esta funciona.
Saludos.
De nuevo trazas la misma línea oblícua entre los dos objetos importantes de la imagen, como en Dos Piedras, aunque esta vez la comunicación va de dentro de la foto hacia fuera; hacia el espectador (la mirada del niño), y hacia una continuación del espacio en el marco izquierdo (alguien que habla con la señora desde fuera de la imagen). Creo que la decisión de la medición sobre el niño fue la más conveniente.
Me gusta.
Saludos.
:) preciosa :)
Soy de la opinión de Toni: funciona.
Solamente cuando queremos ser muy descriptivos se hace indispensable una iluminación homogénea.
A mi que que se quemen los blancos en esta toma me da igual. ME GUSTA.
Gran toma!
Y grácias por tus comentarios.
Un saludo
En teoría podrías haber recuperado los tonos medios con Photoshop pero eso sería fácil. Hay que ser atrevido.
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