Estos dias no estaré detrás del ordenador, así que he programado automaticamente esta entrada. Los comentarios ya los subiré cuando pueda.....
De pequeños hacíamos cometas con papel de cebolla, cañas e hilo grueso. De pegamento usábamos harina y agua, y para la cola, trapos viejos de colores vivos. Había veranos que la calle donde vivíamos era como un taller enorme de cometas, y todas las familias participaban en la construcción. Yo las prefería que volaran bien antes que bonitas, y llegamos a desarrollar bastante arte en el tema. Cuando se rompían, llorábamos porque para nosotros ya eran algo mas que caña y papel. Era nuestra manera de tocar el cielo.
Este verano pienso contruir una cometa con mi chaval.
Olympus E3 + Zuiko 12-60
8 amigos han escrito:
Que hermosas fotos! Me has dejado boquiabierta...
Felicidades!!..me dare una vuelta por tu blog que me gusto mucho.
Saludos!
Una situación muy difícil, por el contraluz, y muy bien resuelta. Felicidades, Martín.
¡qué hermosura!!
Tu relato me ha recordado la infancia de papel de seda, carrizo, engrudo e hilo y la misma tarea cuando llegaba ese verano ecuatorial que es más como una primavera sin lluvia.
Gracias, Martín
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Me gusta la composicion, la viveza que da ese azul y la sensacion de libertad de la cometa.Saludos
Esta cometa en el inmenso azul es de una belleza total y muy relajante mirarla. Te felicito por "enésima" vez.
Saludos
"Era nuestra manera de tocar el cielo". Me ha encantado Martín; el comentario y la fotografía de una cometa que deja ver la luz del sol, que es libre...
Me encanta la imagen y el comentario (:
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